La caverna política y mediática españolista, de allá y de aquí, está a favor del sector de la minoritaria CUP y de sus líderes más conocidos como Anna Gabriel, hija de mineros, porque intentan que el proceso soberanista catalán fracase. Ella, si fuera coherente, debería segar las raíces cristianas de Catalunya con un buen golpe de hoz y tendría que cambiar su nombre y su primer apellido tan insoportables. Anna es considerada la esposa de Joaquín, la madre de María que es la madre de Jesús de Nazaret. Santa Anna es patrona de las mujeres trabajadoras y de los mineros. Gabriel es un personaje bíblico con la misión de hacer de mensajero entre Dios y los seres humanos. Hay que abrir un debate público y transparente sobre el nombre y el apellido que Anna Gabriel debería adoptar para que deje de ser doblemente santa antes de que acabe la legislatura. La decisión no es personal. Hay que convocar una asamblea de la tribu porque corresponde colectivamente a la tribu cupaire decidir en función de lo que significan sus siglas. CUP o Caverna Unisex Provinciana. Y si pueden boicoear a los malos de Junts pel Si, mejor.